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Tres estudiantes de la Escuela Vida fueron parte de nuestro organismo durante tres semanas. Una hermosa experiencia para lo que les viene.
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Estudiantes secundarios de la Escuela Vida finalizaron sus prácticas en la Defensoría del Pueblo. Jóse Luzmila Casanova Muñoz, Natalia Cristal Barros y Tomás Innamorati Macome se despidieron del organismo agradeciendo la predisposición de todo el equipo de trabajo para acompañarlos en esta experiencia de aproximación al ámbito laboral.
Las pasantías se organizaron en tres semanas durante las que José, Cristal y Tomás rotaron por las áreas de Atención al Público, Mediación y Legales del organismo, de modo de conocer distintas aristas del ejercicio de la abogacía que se llevan adelante en el organismo, en virtud de su interés de estudiar derecho al finalizar su formación secundaria.
En la evaluación de su experiencia, los estudiantes pusieron en valor la dedicación del equipo de la Defensoría para explicarles las tareas, así como acompañarlos en su proceso de aprendizaje. “Aprendimos un montón en un ameno ambiente laboral”, fueron algunas de las palabras que compartieron al evaluar su experiencia.
El defensor del Pueblo, Gustavo Pereyra, les agradeció por su compromiso. “Nos enriquece tener jóvenes en nuestra institución y ha sido un placer tenerlos aquí”, les dijo al despedirlos para luego alentaros a continuar con sus estudios de nivel superior.
La actividad se enmarca en el Convenio de Prácticas Profesionalizantes, firmado entre la Defensoría del Pueblo y la institución educativa, en consonancia con la legislación vigente. El objetivo es acercar a los estudiantes a una experiencia laboral afín a sus intereses profesionales.
